¡A escribir nuestra vida!

26 de febrero de 2011

Eran casi las cuatro de la tarde cuando llegó Azael, acompañado de un delicioso cargamento de pasteles hechos por nuestra amiga Blanca, para festejar el inicio de los talleres de pintura y creación literaria (autobiografía), en el Centro de Actualización del Magisterio de Iguala.

     Martes 22 de febrero de 2011: fecha que recordaremos como el principio de una nueva aventura en pos del fortalecimiento de la formación inicial de los futuros maestros de educación secundaria.

     Rosario Román Alonso había llegado a la escuela una hora antes. Previsora como siempre, deseaba conocer el espacio donde enseñaría a los nuevos artistas, que todos somos creativos y tan solo hace falta descubrirlo.

     Al mismo tiempo que Azael, llegó José I. Delgado Bahena. En medio de las prisas, le saludé y experimenté una inmensa alegría de que acudiera a mi invitación, para apadrinar el taller que conduciré a lo largo de un semestre, con noveles escritores que buscan hallar, o bien, consolidar su voz literaria, a través de escribir su autobiografía.

     A las cuatro en punto, los jóvenes estudiantes ya estaban listos para reencontrarse con su sensibilidad y talento, por medio del lápiz y el papel. ¿Qué tal si dibujamos con la mano izquierda? Propuso Rosario a sus alumnos –diestros–, para quienes ello representó un desafío, a la par que un delicioso regocijo.

     Por nuestra parte, el autor del inquietante “Manual para perversos”, y yo, iniciamos nuestra tarea con quienes cortejan a las palabras, para formar con ellas textos plenos de belleza y honestidad. En aquel salón, Luis, Beto, Lehi, Ixchel, Conchis, Bere, Gris, Uriel e Ilda, expresaron sus razones para recuperar recuerdos aparentemente olvidados, por medio de la escritura autobiográfica. Sin excepción, ellos destacaron los beneficios de hacer trascender los tesoros escondidos en su individualidad. Mi amigo el escritor José I. Delgado Bahena, a su vez nos compartió con humildad y sencillez, acertados consejos para escribir. De su mano, echamos un vistazo a la “caja negra” del proceso creador. Él, destacó la importancia de trabajar con los textos e invertir en ellos dedicación y sudor. También, a partir de su experiencia, los ahí presentes confirmamos que una obra debe ser revisada críticamente por otros lectores además del propio autor, previamente a que ésta, mire al fin la luz al publicarse. Asimismo, cuando mencioné que ocuparíamos un cuaderno, compañero de viajes, tristezas y locuras, Delgado Bahena ratificó con entusiasmo lo importante de ello. En sus hojas, con toda seguridad, cada participante del taller atrapará detalles de lo cotidiano, así como evocaciones de momentos significativos de su existir, para recrear episodios presentes y transcurridos de su vida.

     Al dar cuenta de su devenir por medio de su puño y letra, cada joven escritor se suma a la respuesta de Rosario Castellanos, al por qué y para qué escribir. Así, todos los exploradores de este territorio literario, tendremos la convicción de que lo hacemos porque alguien, alguna vez, dijo que gente como nosotros, no existe, porque nuestro cuerpo no proyecta sombra, no arrojamos peso en la balanza y nuestros nombres, son de los que se olvidan. Nada más equivocado.

     Escríbanme: el_ladron_de_libros@live.com.mx